Hola, mi nombre es Gisselle. ¡Qué felicidad estar de regreso nuevamente en el blog!
Si es la primera vez que estás aquí, o si te has unido recientemente, quiero darte la bienvenida y agradecerte por ser parte.
Me encanta escribir y compartir mis pensamientos en este espacio.
Estuve perdida, pero créeme, me he estado encontrando.
Gracias por estar aquí.
Una Tarde Especial
Es jueves 29 de febrero, cinco de la tarde, acabamos de llegar mi hija de seis años y yo al parque. Venimos de una prueba de natación, ella está emocionada pues le encantó y quedó inscrita los sábados.
Al minuto de llegar al parque, se sentó en una de las bancas. No quería acercarse a un grupo de niños que ya estaba pero que no conocía. Ella observó, esperó, como siempre digo, se dio su tiempo para “terminar de llegar”.
Pude ver cómo conectó con lo que estaba pasando alrededor. Observó, escuchó el ruido y a cada uno de los niños. Vi cómo se pasaba los dedos por su pelo semi mojado…y con la mirada sonriente (quizás recordando que recién había nadado).
Así pasó unos minutos hasta que finalmente se atrevió a acercarse. La pasó fenomenal, se integró al grupo y cuando llegó la hora, literalmente tuve que sacarla con “grúa”.
Su padre y yo sabemos que nuestra hija no es que sea tímida, sino que es NAS (niña altamente sensible). Lo heredó de mí, pues soy PAS (persona altamente sensible).
Y me encanta ver cómo a tan temprana edad, ya está aprendiendo poco a poco hacer las cosas cuando siente el llamado. Sin prisas, permitiéndose realmente sentirse cómoda en donde y con quien está.
Cuando realmente le fluye. De hecho, la clase de prueba de hoy de natación obedece a que finalmente nos dijo (y luego de pensarlo varias semanas) “papá, mamá, estoy lista, quiero dar clases de natación”.
Fue un momento mágico, pues hasta ese instante no teníamos precisión en qué tipo de clases adicionales inscribirla los sábados. Entre semana ya sale a las tres de la escuela, y al llegar ella solo quiere descansar y luego jugar ya sea en casa o en el parque.
Hasta la semana pasada no sabíamos si sería arte, canto, ballet o hasta “clases de ciencias” nos propuso. Ella tiene varios intereses, le encanta cantar, construir cosas, pintar con pintura acrílica, tiene hasta su caballete de pintura y varios tipos de pinceles.
Pero eligió natación y la verdad fue increíble ver cómo ella desde su determinación nos dijo 'es lo que quiero'.
Presencia y Conexión
Y aquí ESTOY, observándola mientras juega en el parque. Nótese el énfasis en 'estoy' (más adelante te cuento por qué).
Mientras la veo desenvolverse, puedo sentir, oler, percibir cada brisa que roza mi rostro. Puedo escuchar el crujir de las hojas cuando los niños pasan. Escucho a una ardilla que está bien entretenida en el árbol.
Noto que estoy en total presencialidad. Puedo sentir lo que es estar realmente en mi elemento, en mi tranquilidad.
Sí, tengo muchas cosas por hacer ya que fundé dos emprendimientos. Artes que aprobar para unas publicaciones de Arunima Store, e información por enviar de mis asesorías en Smooth Transitions.
Pero de regreso a casa simplemente quise traer a mi hija al parque. Reflexioné que una de las razones por las que tomé mis decisiones de vida hace dos años, fue para poder decidir por primera vez “el ritmo en el que haré las cosas”.
Y claro, seguir trayendo a mi hija al parque, pero más allá, traerme también a mí. Sí, antes yo traía solo a mi hija al parque, pero me dejaba a mí, pegada a la silla de mi oficina en casa.
Llevaba mi presencia al parque, pero mi “esencia” se quedaba conectada, seguía trabajando a mil. Solo mi cuerpo de mamá venía al parque.
Y ahora que me conozco mucho más a profundidad, puedo ver la diferencia más que nunca. Si bien estaba en el parque, al mismo tiempo pensaba en 200.000 cosas más del trabajo al mismo tiempo.
En ese entonces trabajaba 70 horas semanales (conoce más en esta entrada del blog). Y sí, yo conversaba con las personas, conectaba con ellas, hacía chistes, estaba en principio sí, feliz, claro. Me alegraba traer a mi hija, pero no me traía a mí, estaba totalmente desconectada.
Y desde que comencé a emprender, he notado que ahora sí ESTOY en el parque. Me siento ahora sí, realmente presente y conectada, pues antes estaba disociada.
Y HOY en este momento de tranquilidad, mientras la observo, noto un poco más su autonomía. Pues no me gusta usar la palabra independiente. Todos somos dependientes a lo largo de nuestra vida dependemos de tantas cosas, pero sí más autónoma.
Ya no necesita la manito de mamá siempre con ella. Y quizás eso fue lo que me ayudó a transitar esos periodos tan oscuros de estrés cuando la traía al parque.
Ella me extendía su manito y era todo…ahora comprendo que eso era lo que me mantenía al menos aterrizada.
Me acuerdo de que en algunas ocasiones y al estar conversando con otras madres (y pensando que al regresar a casa debía seguir trabajando), mi hija buscaba el pecho.
Era solamente en esos momentos en que realmente yo necesitaba bajar las revoluciones.
Ella sabía que era lo que yo necesitaba también.
Ahora lo entiendo.
Mi Reflexión Final
Y gracias al tomar la decisión de independizarme para emprender, por primera vez en mis casi cuarenta años siento que estoy realmente en total presencialidad.
Como les compartí en Instagram hace unos días, me siento en mucha más alineación y conocimiento de mi ser.
Y si me preguntas hoy, considero que volvería a hacer todo de nuevo, a pasar por lo mismo, transitaría todo para poder así apreciar tanto como lo hago ahora de estos momentos.
No ha sido fácil, he corrido, he soltado, he saltado con mucho miedo, con muchas dudas, pero sigo avanzando en cada reto.
Pues emprender y dejar mi carrera profesional ha significado no solo un desprendimiento de conductas negativas, sino un reencontrarme conmigo, conocerme.
Estuve en diferido por diez años, quizás más. Y por primera vez estoy mirando hacia adentro.
Haciendo las cosas desde el corazón desde la intención, desde mi verdadero ser.
Me siento muy feliz y así mismo y en alineación conmigo mi tienda online Arunima Store seguirá evolucionando (o involucionando), pues ha sido hasta el momento un hermoso proceso.
Pues tengo otra pasión, amo ayudar a otras personas a nivel profesional para una búsqueda de empleo con intención en Smooth Transitions, a mi ritmo, a mi manera.
De Arunima Store me encanta poder ser creativa, y crear cosas lindas como compartí en este reel. Así que con esa misma idea quizás mi tienda online más adelante traerá cosas diferentes, pero muy cercanas a mí (cosas lindas que me encantan), y en alineación conmigo.
En la forma e intensidad en que lo puedo llevar.
Gracias por leerme en este espacio y espero que tú también cada vez, que vayas donde sea, te lleves siempre a ti misma.
Hasta pronto,
Gisselle
Tu ritual de self-care con intención en un solo lugar✨
Un abrazo enorme, ¡y hasta muy pronto!
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